La aceras de la ciudad de Oviedo tienen el lamentable honor de ser unas de las mas peligrosas de España. Aparte de su aspecto (que hacen que en cuanto caigan cuatro gota de lluvia presenten un estado de suciedad lamentable), su elevado coste (son unas de las mas caras que existen), se une el riesgo de resbalar por lo deslizantes que son (eso ya ha ocurrido varias veces en zonas como la del ayuntamiento, obligando a perforarlas para dotarlas de un poco de tracción, pero con el paso del tiempo se han vuelto de nuevo como una auténtica pista de patinaje).
La elección de estas aceras ha sido tan nefasta, que en muchos puntos se han tenido que volver a levantar para instalar unas menos resbaladizas y peligrosas.
Lo peor ocurre en la periferia, como siempre, las zonas más olvidadas por este ayuntamiento, para el que solo existe el centro de la ciudad. Calles como Villafria (en la imagen) continúan con peligrosas zonas, ya de por si difíciles de transitar, con la aceras que ha venido instalando Gabino de Lorenzo aún mas, obligando a la gente a que tenga que andar por la carretera para no caer.
Las mejores aceras eran la que estaban antes (las antiguas): de hormigón, baratas, porosas, y nunca se resbalaba. Pero en su afán por gastar el dinero de los ciudadanos como sea, este gobierno del PP no ha tenido mejor idea que ir poniendo las aceras más inseguras del mercado por todas partes.
Lógicamente, ellos no lo sufren. Van en coche oficial a todas partes.
